Los padres que envían sus hijos al colegio esperan que esta institución sea un espacio de certezas y no de dudas, esperan también que sus hijos formen la capacidad para desenvolverse en este mundo que vivimos, contando con todo el bagaje cultural y con principios éticos y morales que los hagan valer como seres completos, capaces de bastarse a sí mismos.
Por eso el compromiso que el colegio establece con los padres, para que esta acción sea conjunta y no haya discordancia entre las partes, ya que sabemos que el aprendizaje sea hace tanto en el colegio, como en los hogares. Insistimos en la coherencia entre la institución y los padres, porque ambos son educadores, siendo la responsabilidad conjunta de acompañar a los jóvenes en este maravilloso camino.
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